“Mis últimas experiencias en la esfera naval me mostraron que el enfoque que me gustaría darle a la gestión, con el respaldo de la Comisión Directiva, es el apoyo a la enseñanza”, de las nuevas generaciones, confió a Altamar News el novel presidente de la Liga Marítima Uruguaya, Fernando Colombo.
El entrevistado encabeza, desde el jueves 14, la Comisión Directiva de esa institución en el período 2024-2026, acompañado del vicepresidente Dimitrio Linas y de los titulares: Miguel Elefteriu, Julio Cóppola, Leticia Gallarreta, Rodolfo Laporta, Freddy Núñez, Héctor Yori, Juan Carlos Susaeta, Oscar Dourron, María Victoria Zorrilla y Miguel De Ocampo.
“La enseñanza es el punto de partida de la contribución a la conciencia marítima, porque se le llega a un público que ya eligió pertenecer al ambiente marítimo en los diferentes escalones jerárquicos que correspondan”, analizó. Precisamente, la promoción de la conciencia marítima es el centro de la acción de la institución que nació en 1986 y cuya sede funciona en el “Museo Casa de los Ximénez”, en Montevideo.
El capitán de navío, fue, en 38 años de profesión, titular de la Dirección Registral y de Marina Mercante, director de la Escuela de Guerra Naval y agregado naval en Alemania, entre otras responsabilidades. También ingresó en el mundo editorial con la edición, en 2016, del libro “Escuela de Guerra Naval 75 años: pensamiento estratégico marítimo al servicio de los uruguayos”, además de la actualización de textos de estudio de la citada repartición militar.
Como director de la Marina Mercante, el entrevistado advirtió la “importancia de la enseñanza marítima específica”, además de en la Escuela Naval, en la Escuela Superior Técnica Marítima, de UTU. “Uno debe estar vinculado a entidades que se dediquen a la promoción de la conciencia marítima”, afirmó.
Colombo reseñó que es socio de la Liga Marítima Uruguaya desde hace dos décadas. Elogió a la presidenta saliente, Silvia Etchebarne, como la primera mujer presidenta de la Liga y más joven en relación a quienes la antecedieron en esa responsabilidad. Etchebarne “le aportó su impronta en la supervisión y en la organización de las diferentes actividades de la institución”, sostuvo. “La Liga Marítima empezó a tener incidencia en algunos sitios donde antes no era escuchada. Éste es un excelente punto de partida de la gestión”, apuntó.